Cuando comenzamos a dibujar personas, la mayoría trazamos una línea para representar el contorno. Esto se debe, en parte, a nuestra experiencia de la escritura, aunque también tiene mucho que ver con nuestra capacidad inata de reconcoer objetos de un vistazo por sus siluetas. Aunque se trata de una capacidad de supervivencia vita, si la usa para dibujar no obtendrá buenos resultados, ya que al concentrarse en la línea, la forma perderá volumen. En realidad, un contorno marca el punto en el que el volumen de una figura tridimensional deja de estar a la vista, como el horizonte que marca el "fin" de un paisaje o del mar.
Dibujar espacios negativos
Cualquier esbozo de una persona debe plasmar el volumen del cuerpo y el espacio vacío circundante que le define. Para practicar la representación de estos conceptos, ponte ante un espejo, apoya la mano que no utiliza en la cadera y haz un esbozo sencillo. Podrás comprobar que resulta más fácil dibujar el espacio triangular que forman el brazo y el torso que determinar los ángulos de las partes superior e inferior del brazo. Dibujar esta forma abstracta te ayudará a establecer dichos ángulos. También te servirá para practicar la visión periferica. Al mirar un poco más allá del modelo, que tiene un campo de forma cónica, y puedes ver grandes formas en lugar de los detalles, que puede añadir después.
La combinacicón de tonos sencillos, unidos al contorno, revelarán formas humanas con volumen. Observa, en primer lugar, los elementos más grandes y no compliques el dibujo. Crea tonos oscuros o sombreados para rellenar el volumen y traza líneas cuando requieran una mayor definición. Al principio debes hacer trazos suaves que se puedan modificar o borrar. Cuando hayas acabado de corregir el dibujo, podrá repasarlas.
En este esbozo, la información básica sobre la forma de la persona que está de pie procede de la líena y el tono empleado para dibujar formas grandes de un modo sencillo. Los detalles se peuden añadir posteriormente
Perfecto gracias
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