domingo, 31 de agosto de 2014

La superposición de tonos o veladuras en la acuarela

Pintar a la aguada o a la acuarela, es del todo corriente la superposición de tonos, intensificando la valoración, ajustando el modelado, creando contraste. Debemos pensar a este respecto que el artista pinta de menos a más aplicando una veladura sobre otra. Para resolver por ejemplo, la forma del volumen de un cubo, lo propio sería:
1.Pintar primero toda la zona en sombra con una veladura gris, de un mismo tono.
2.Esperar a que se seque y aplicar una nueva capa o veladura en el plano más oscuro.
3.Para terminar el modelado de este cubo, a partir del fondo, una estrecha franja de color gris claro...
4.Rápidamente degradada mientras está todavía húmeda, aplicando el pincel con agua limpia, diluyedo la franja inicial con el agua, armonizando mediante la absorción de agua. etc
Lo único a tener en cuenta para pintar un tono sobre otro, es la necesidad de que el primero esté completamente seco. Ha de procederse, además con cierta rapidez, al aplicar la segunda veladura, para no destruir o alterar la primera.


domingo, 10 de agosto de 2014

Otra entrada de como dibujar ojos realistas

Ya se que he puesto otras maneras, pero considero que se aprende practicando y no siempre vais a querer pintar el mismo ojo una y otra vez, verdad??? Además en cada post se pinta de una menera diferente y con ello aprendes nuevas técnicas. Estas en un principio te van a servir de apoyo. Finalmente ya usarás las tuyas propias.
Otro de los motivos por el cual cuelgo varios tipos de ojos es para que en vuestros retratos sepais retratar distintos tipos de ojos, distintos tipos de expresiones y posturas.
Espero que os guste

sábado, 9 de agosto de 2014

El blanco en la acuarela, como rebajar una zona oscura

No hay pintura blanca; no podemos pintar con color blanco. El blanco es el papel mismo. Hay que reservarlo desde el principio.
Cabe, no obstante, para determinados casos, en plan no de obtener blancos puros, pero si grises muy claros, servirse de una fórmula parecida a la explicada anteriormente cuando tratabamos de rebajar un tono absorviendo el agua y el colorante de una zona determinada. 
Imaginemos una zona pintada con un gris muy oscuro, inclusive de color negro y que además ya está seca del todo. Supongamos que en esta zona ha de figurar una pequeña forma, de tono más claro que el fondo. Una estrella por ejemplo. 
Pues bien; para abrir ahí un gris claro, se empieza por cargar el pincel con agua absolutamente limpia y se moja abundantemente la zona a tratar, en plan de acumular agua, como formando una gruesa gota. 
Se aplica seguidamente el pincel tratando de diluir el color existente en la zona con el agua acumulada en la misma. Esta labor requiere cierto tiempo y paciencia, acariciando con el pincel, suavemente para que el colorante se desprenda y diluya con el agua.
Tan pronto como el color ha sido ya disuelto, se limpia de nuevo el pincel, se seca y escurre con el trapo y se inicia la tarea de aboserber agua-tinta; de limpiar de nuevo el pincel, absorber una y otra vez, etc. Hasta conseguir secar prácticamente la zona tratada, con lo cual se obtendrá un tono más claro respecto al tono circundante. 
Bastará para terminar, un cuidadoso retoque de los límites para dar por terminada la estrella.

Como pintar un degradado con acuarela

Los tres factores que condicionan la resolución de un degradado pintado a la agua son:
- Pintar partiendo del tono más oscuro
- Extender y diluir ese tono en agua limpia
- Armonizar con el pincel escurrido.

Supongamos que un degradado ammplio en forma de franja horizontal, yendo desde el negro al blanco. Cumpliendo con la primera norma "partir del tono más oscuro" empecemos por pintar una macha negggra en la iniciación del degradado. Con la máxima rapidez limpiaremos el pincel, lavándolo en agua limpia, y rápidamente humedeceremos toda la zona en la cual se va a extender el degradado hasta legar al límite de la mancha negra pintada anteriormente. Es importante que esta mancha esté todavía húmeda, para diluirla entonces con el agua de la zona humedecida, extendiendo y degradando con rápidas pasadas verticales y degradanco con rápidas pasadas verticales del pincel.
Cuando se llegue a la zona de la mitad del degradado, se limpia de nuevo el pincel y se escurre con un trapo, llevándolo de nuevo a la zona media del degradaddo, restando por tanto agua y con ella color de esa zona límite. De esta manera se va limpiando de nuevo y escurriendolo, hasta extender el color hacia la zona todavía blanca.
Después de la primera pasada, se puede realizar una por encima para retocar y igualar la primera.
Es  cuestión de introducir y restar agua, de extender el color y rebajarlo, siempre contando con que tiene que estar la mancha húmeda (para evitar cortados) y de que las partes oscuras no lleguen a invadir del todo las claras. Hay que recordar que en la acuarela siempre se está a tiempo de añadir color, de reforzarlo, pero difícilmente podrás volver atrás del todo, convertir en blanco lo que ha sido pintado en negro o en gris.